El Mundial de Catar arrancó el domingo, 20 de noviembre, el primero que se disputa en invierno, también como la última gran oportunidad para jugadores que están en el torneo aunque su rendimiento en sus respectivos clubes no es el mejor en estos momentos, como es el caso del mediapunta del Real Madrid Eden Hazard, el delantero del Manchester United Cristiano Ronaldo o el extremo de Los Angeles FC Gareth Bale, entre otros.
- Eden Hazard. La situación del belga es la más compleja. Hazard se la juega en Catar, la que será una de sus últimas balas para demostrar que quiere recuperar su alto nivel y gozar de más oportunidades en el conjunto blanco. Será su tercer Mundial, al que llega en uno de sus peores momentos de forma física y sumido en la decepción constante.
Llegó hace cuatro temporadas como una gran estrella llamada a liderar una nueva generación ya sin Cristiano Ronaldo en el barco merengue y después de que el club blanco no pudiera ficharle en el verano de 2018, justo tras un Mundial en Rusia donde brilló con luz propia.
Sin embargo, su rendimiento le ha llevado al ostracismo en el Real Madrid, con actuaciones muy poco relevantes y siempre lastrado por las lesiones. En este curso solo se ha puesto la camiseta en seis ocasiones, para disputar un total de 229 minutos, marcar un tanto y dar una asistencias.
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Unos números demoledores que podrían hacer pensar que no merece estar en Catar, pero el seleccionador del combinado belga, Roberto Martínez, está empeñado en sacar el máximo rendimiento a Hazard. Con Bélgica, el ex del Chelsea es el capitán y líder, tiene galones y se ha ganado el respeto de su entrenador. Por ello, llega al Mundial para desquitarse y quitarle la razón a Carlo Ancelotti, que sigue sin contar con el mediapunta.
- Cristiano Ronaldo. Diferente es la situación para Cristiano Ronaldo. El portugués esta envuelto en una nueva polémica tras sus duras declaraciones contra el Manchester United y su entrenador, Erik ten Hag, las cuales han dolido mucho en el club, generando una especie de cisma en la plantilla.
El portugués llega a Catar con más problemas que argumentos a favor para levantar el único trofeo que le falta en su vitrina. Además, sólo ha marcado tres goles en este primer tercio de temporada, marcada por sus suplencias constantes y encontronazos con su técnico. Por todo esto, el ‘crack’ luso pretende que el Mundial sea el antídoto contra su incierta situación actual, para confirmar que sigue siendo un jugador determinante.
- Gareth Bale. El galés nunca llegó a terminar de encandilar a una afición del Real Madrid que siempre exigió más, sobre todo tras la marcha de Cristiano Ronaldo. Sus goles en momentos decisivos le confieren la condición de leyenda blanca, aunque su actitud fría y distante no parecen enamorar al aficionado. Ahora, en Catar, podrá desquitarse y liderar a Gales en su primer Mundial desde 1958.
Su fichaje por Los Angeles FC generó mucha expectación en la MLS, pero tampoco mejoró los números en el Real Madrid. Suma 12 encuentros en Estados Unidos, con dos goles, pero solo roza los 350 minutos sobre el campo. Además, desde finales de septiembre apenas ha jugado media hora con su nuevo club.
- Joao Félix. A pesar de ser una de las grandes apuestas del Atlético de Madrid, el portugués sigue sin explotar en la que ya es su cuarta temporada como rojiblanco. Comenzó como titular para Simeone, pero su influencia se ha ido diluyendo, con solo dos titularidades en los últimos diez encuentros con el Atlético, que le fichó por más de cien millones de euros.
Con la selección de Portugal, donde tampoco tiene un hueco asegurado en el once, buscará redimirse y convencer al ‘Cholo’ a base de goles y actuaciones decisivas para que recupere el estatus perdido en los últimos meses.
- Jordi Alba. Con ‘overbooking’ en su posición en el Barça, el lateral español no goza de la máxima confianza de Xavi Hernández, algo que ha influido en sus minutos de juego. La alternancia entre titularidad y suplencia ha sido la tónica general en este inicio de curso, disputando 828 minutos y cuestionado pese al peso y la jerarquía en su club. Unos galones que si parece que mantendrá con Luis Enrique, más después de los problemas físicos de José Luis Gayà.
- Raphael Varane. Cuando restaba un mes para el comienzo del Mundial, el central francés se marchó entre lágrimas por una lesión que le alejaba del torneo. Sin embargo, ya recuperado está en la convocatoria de Deschamps, quien sí parece confiar en el defensor galo. No obstante, este Varane no se parece al que se vio en Madrid, acompañando a Sergio Ramos en el centro de la zaga. Más cuestionado que en otras ediciones y justo físicamente, el zaguero se ampara en hacer un buen Mundial para encarar el resto de temporada con más confianza.
- Harry Maguire. A pesar de no contar demasiado para Ten Hag en el United, donde comenzó como titular y ahora con apariciones intermitentes, para el seleccionador de Inglaterra, Gareth Southgate, es una de sus piezas importantes. “Es uno de nuestros mejores centrales”, llegó a decir en las semanas previas al inicio del Mundial. Así, podrá reivindicarse en Catar contra las duras críticas recibidas, y darle la vuelta a una situación más que complicada para uno de los defensas más caros de la historia de la Premier.
- Luis Suárez. El exdelantero del FC Barcelona y el Atlético de Madrid volvió a Uruguay, con Nacional, para seguir su carrera profesional, aunque sin demasiado éxito. El charrúa ha disputado 16 encuentros en competiciones de su país, convirtiendo ocho tantos, pero ya alejado del fútbol europeo, quiere recuperar su estatus y utilizar el Mundial como escaparate en su última gran obra con su selección.
- Memphis Depay. Su último partido con el Barça fue el 17 de septiembre. Desde ahí, 12 encuentros de baja por lesión, pero Van Gaal le reservó un lugar en su lista, por lo que parece que ocupará un lugar de privilegio. Pasará del olvido azulgrana al protagonismo de la ‘Oranje’, en busca de un rendimiento que nunca dio en el conjunto catalán -3 partidos, 1 gol y 131 minutos es su balance con el FC Barcelona este curso-.
- Ansu Fati. Desde el 7 de noviembre de 2020, cuando se rompió el menisco interno de su rodilla izquierda, no ha vuelto a ser el mismo. Titularidades y protagonismo con cuenta gotas para un delantero con un olfato goleador envidiable. Aún así, y a pesar de las “dudas” reconocidas por el propio Luis Enrique, el seleccionador ha decidido apostar por él en el ataque español, donde puede ejercer de revulsivo en una cita a la que llega con tres goles en 14 partidos.
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