Una fiscal confirmó hoy la muerte de otros siete mineros informales a manos de elementos de seguridad de empresas mineras que los acusaban de explotar oro en sus tierras, con lo cual suman 14 las víctimas.
María del Rosario Lozada informó además que no se descarta el hallazgo de más cadáveres, pues varios mineros artesanales son buscados por sus familias, que no saben de ellos y anoche bloquearon la importante carretera Panamericana pidiendo acciones más drásticas ante los crímenes.
Los primeros siete muertos fueron hallados en el Huanaquita, un paraje del municipio de Atico, parte de la provincia de Caravelí, de la sureña región de Arequipa.
Los mineros informales fueron atacados los días 2 y 3 de junio, según sobrevivientes, por cientos de guardias de seguridad de las empresas Atico Calpa y Calpa Renace que usaron armas de fuego, incluyendo fusiles de alta precisión utilizados por francotiradores.
El sábado último se encontraron siete cadáveres y ayer otros siete, que los asesinos habían lanzado al fondo de un precipicio y, hasta el momento, solo se ha identificado a Carlos Mendoza, Milton Zelada, Alex Castañeda, Jordi Solorzano, Alain García, Leonardo Lino y Gilmer Romero, todos muertos a balazos.
La Policía de Arequipa confirmó por otra parte que detuvo a 31 hombres señalados como integrantes del grupo de atacantes e incautó dos fusiles de largo alcance y siete armas cortas.
La fiscal Lozada, quien dirige las investigaciones, informó que cuenta con grabaciones de video y audio de los incidentes y registros de utilidad para identificar a los asesinos.
Paralelamente, la Defensoría del Pueblo informó que impulsa la instalación de una mesa de diálogo entre las partes en conflicto.
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