En el 2022 el IPD vio desfilar por la presidencia a cinco funcionarios como máxima autoridad del deporte peruano. La permanencia más corta fue la de Julio “Coyote” Rivera con apenas 53 días desde su nombramiento el 24 de enero de 2022.
La parte de la política inmiscuido en el deporte, es una casual de la corta permanencia de los presidentes el IPD. El puesto tiene corta vida y las consecuencias afectan al deportista y al deporte en general.
Antes del “Coyote” Rivera estuvo en la presidencia Gustavo San Martín y posteriormente al hijo de doña Peta pasaron Máximo Pérez Zevallos y Juan Carlos Huerta (octubre 2022, febrero 2023).
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En inicio de semana el Ministerio de Educación sorprendió con el nombramiento de Guido Flores Marchán, quien en sus primeras declaraciones dijo que darán total respaldo a los deportistas que irán a los Juegos Panamericanos de Chile 23 y los Juegos Olímpicos de París.
Flores Marchán indica que darán continuidad a lo que ya está establecido porque no hay lugar al borrón y cuenta nueva. Su primera actividad-dice. Será reunirse con todos los presidentes de las distintas federaciones deportivas.
La incertidumbre invade a todos los involucrados en el deporte y los múltiples problemas que deberá resolver el nuevo titular del IPD: El básquetbol en total abandono, apoyo a los deportistas de alta competencia, infraestructura en el interior del país y la captación de talentos, son temas que Guido Flores Marchán deberá resolver. ¿Le alcanzará el tiempo?
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